Los más de 160 talleres protegidos que funcionan en diferentes partes del país y que ofrecen trabajo a, aproximadamente, diez mil personas con discapacidad, atraviesan por un crítico momento. A través de la plataforma Change.org, elevaron un petitorio al jefe de Gabinete de la Nación, Santiago Cafiero, para que firme un proyecto para financiar a las organizaciones.
La Red Federal de Talleres Protegidos de la República Argentina inició una colecta de firmas digital, a través de la plataforma Change.org, para que el Estado asista a las más de 160 instituciones que la conforman y que están atravesando por un momento crítico.
“Hasta ahora, más de 160 instituciones de la Sociedad Civil, conformadas como Talleres Protegidos, sumamos voluntades para defender la fuente de trabajo de casi 10.000 personas con discapacidad en todo el país que encuentran en ellas su lugar de pertenencia y desarrollo laboral”, comenzaron redactando en el petitorio digital, que puede encontrarse en la página mencionada con el nombre de “Petitorio de la Red Federal de Talleres Protegidos al jefe de Gabinete de la Nación”.
Los talleres protegidos son entidades de bien público y sin fines de lucro, que tienen como finalidad la producción de bienes y/o servicios y cuya planta está integrada por personas con discapacidad mental y/o intelectual.
Lamentablemente, no reciben asistencia económica del Estado para hacer frente a sus obligaciones mensuales, motivo por el cual la cuarentena los ha puesto en jaque y no cuentan con los recursos necesarios para mantenerse.
“La invisibilidad del trabajo que se lleva a cabo puertas adentro de los talleres y la dificultad que conlleva sostenerlo, también es una realidad. No somos empresas, ni Pymes, somos ‘empresas’ de la economía social y solidaria en su gran mayoría asociaciones civiles fundadas por padres o familiares de personas con discapacidad, quienes a través de los años seguimos sosteniendo económicamente la estructura de esas instituciones”, clamaron en el petitorio, en el cual esperan alcanzar las 7.500 firmas.
Explicaron, de todas formas, que mediante el Programa de Apoyo a los Trabajadores de los Talleres Protegidos del Ministerio de Trabajo, el Estado asiste a los trabajadores con discapacidad con un incentivo que a la fecha asciende a 3.300 pesos mensuales, lo cual consideran una “suma meramente simbólica” ya que “no se consiente que eso pueda ser considerado ‘sueldo’ acorde a las tareas que cada uno realiza en el Taller”.
A fines de abril, Claudio Espósito, director ejecutivo de la Agencia Nacional de Discapacidad, mantuvo una reunión con la Comisión de Discapacidad de la Cámara de Diputados en la que comprometió los fondos de la Ley de cheques para la asistencia financiera para los Talleres Protegidos. Sin embargo, según advirtió el propio Espósito, el programa requiere la autorización del jefe de Gabinete de la Nación, Santiago Cafiero.
A más de dos semanas de aquella promesa, muchos talleres se han quedado sin fondos y, al no tener una solución ni explicación, ya prevén su cierre definitivo. Para evitar llegar a tal punto, fue que decidieron iniciar esta colecta de firmas virtual.
La situación en Tandil
En tanto, desde el Taller Protegido de Tandil, Lourdes Martínez indicó a El Eco Multimedios que en la ciudad “podemos decir que tenemos algunos meses más de vida y que vamos a poder salir adelante”. De cualquier forma, reconoció que a lo largo del país hay muchos talleres que “la están pasando mal” y que han quedado fuera de las ayudas que ha brindado el Gobierno.
“Los chicos no están trabajando, y son el eslabón más importante. Acá en Tandil son 66 personas con discapacidad. Y de repente el trabajo lo están haciendo las auxiliares que tenemos en el taller. Entonces se empieza a sentir, porque se rompe la cadena tanto en la producción como en la compra”, expresó Martínez.
Informó que el petitorio que se lanzó de manera virtual es “el final de los formales y tranquilos”, debido a que es un problema que acarrean desde principios de abril.
Remarcó que las ayudas que anunciaron desde el Gobierno fueron solo para las grandes empresas y las Pymes, como así también para quienes contaban con personal en blanco, pero que se “olvidaron” de los talleres protegidos. “En Tandil por suerte las supervisoras se pusieron el trabajo al hombro. Pero en Olavarría, por ejemplo, va a cerrar uno de los talleres”, clamó.
Remarcó que el director ejecutivo de la Agencia Nacional de Discapacidad les había asegurado que habría dinero pero ya han pasado algunas semanas y nada ha cambiado: “Nos dice que lo que hay que firmar está en el despacho de Cafiero. Es decir que se sacó la responsabilidad y se la pasó al jefe de Gabinete”.
Solicitan ayuda institucional, no dinero
Muchas personas malinterpretaron el petitorio y creyeron que lo que en realidad están solicitando, o necesitando, los talleres protegidos es una simple ayuda económica. Sin embargo, Martínez aclaró que lo que piden es un asistencia institucional para que se les permita continuar trabajando día a día.
“Mucha gente nos dice ‘necesitan plata’, y no, nosotros necesitamos que el Estado escuche la parte que le toca. Porque vos me podés dar plata hoy, pero el mes que viene estás con otra prioridad y no me la vas a dar”, explicó.
Reconoció que celebran el hecho de que les hayan aumentado el pago a los operarios, pero resaltó que ahora falta la ayuda para los talleres, puesto que si éstos cierran, los chicos se quedarán sin el trabajo y ya no podrán cobrar el bono.
FUENTE: ELECO DE TANDIL