La ciencia avanza a pasos acelerados de la mano de la Inteligencia Artificial. Un nuevo dispositivo fue desarrollado esta vez para detectar enfermedades dentro del organismo humano. Se trata de una pequeña cámara ubicada adentro de una pastilla que permitirá que la gente controle si tiene cáncer de intestino o estómago en sus propia casa. Además de detectar los primeros signos de cáncer, ayuda a los médicos a hallar otras afecciones intestinales en sus pacientes como la enfermedad de Crohn.
El dispositivo (escondido adentro de una pastilla) se traga con agua como si se tratara de una píldora convencional. Una vez ingerida, a medida que pasa por el organismo, va tomando dos fotografías por segundo hasta llegar al estómago. Las imágenes se transmiten en una grabadora que se coloca en la cadera del paciente, lo que les permitirá a los médicos proporcionar un diagnóstico rápido, de apenas unas horas.
Por ahora, el kit es caro: cuesta 500 euros. Pero los expertos ven muchas ventajas. Dicen que, además de ser más rápido y conveniente, evitará que las personas deban someterse a un examen clínico incómodo. El jefe del Servicio Nacional de Salud (NHS), Simon Stevens, dijo al respecto: “A medida que salimos del pico de COVID-19 y la interrupción de la pandemia, el NHS ahora está avanzando con una innovación genuina para expandir los servicios para muchas otras condiciones físicas”.
En ese sentido, explicó: “Es por eso que ahora estamos probando estas ingeniosas cámaras cápsula para permitir que más personas se sometan a investigaciones sobre el cáncer de manera rápida y segura. Lo que suena a ciencia ficción, ahora se está convirtiendo en realidad”.
Los científicos también dicen que el uso de esta tecnología reduce el riesgo de propagación de coronavirus ya que no es necesario que los pacientes vayan al hospital o a consultorios privados para realizarse procedimientos médicos o controles que generan molestias.
Los jefes del NHS enviarán 11.000 muestras de estas cámaras, conocidas como endoscopia de cápsula de colon, a pacientes en más de 40 lugares diferentes de Inglaterra durante los próximos 12 meses, como parte de un programa piloto de 6 millones de euros. En caso de resultar exitosas, podrán usarse de manera rutinaria para la detección de distintos tipos de cáncer.
Otra de las ventajas de estos dispositivos encapsulados es que ofrecen resultados rápidos para un diagnóstico temprano de una posible enfermedad. Aproximadamente, la mitad de los pacientes ahora espera más de seis semanas para una colonoscopia debido a la pandemia de coronavirus.
El cáncer de intestino es el cuarto cáncer más común en el Reino Unido, con más de 40.000 casos nuevos al año. Mata anualmente a 16.000 personas. Sin embargo, la detección temprana de la enfermedad podría salvar a alrededor de 2.400 vidas cada año.
Según informaron los expertos, actualmente la prueba se ofrece a todos los mayores de 60 años en Inglaterra, aunque en Escocia los controles de detección de cáncer se realizan después de los 50 años. De acuerdo a The Sun, que lanzó una campaña al respecto, si en el Reino Unido se redujera la edad de detección del cáncer, se salvarían alrededor de 4.500 personas al año.
Por su parte, la directora ejecutiva de Bowel Cancer UK, Genevieve Edwards, dijo: “Esto tiene el potencial de marcar una gran diferencia para las personas con síntomas de cáncer de intestino y podría ayudar al NHS (Servicio Nacional de Salud, en inglés) a priorizar a aquellos que necesitan urgentemente más pruebas y controles”.
FUENTE: Radio EME