El ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas presentó hoy el proyecto de ley “Marco regulatorio para el desarrollo de la industria del cannabis medicinal y el cáñamo industrial” que establece los mecanismos para la regulación de la actividad, fomenta el desarrollo de la cadena productiva y, especialmente, promueve el desempeño de las cooperativas del sector y de las PyMEs.
El anuncio, que se dió en el marco del Consejo Económico y Social en el Museo del Bicentenario, se realizó en conjunto con el secretario de Asuntos Estratégicos de la Nación y presidente del Consejo Económico y Social, Gustavo Beliz; la ministra de Salud, Carla Vizzotti; el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Roberto Salvarezza; el ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca, Luis Basterra.
“El mercado de cannabis medicinal y cáñamo industrial crece exponencialmente a nivel global, es una nueva fuente de empleo de calidad y desarrollo productivo”, afirmó Kulfas durante la presentación del proyecto de ley y ponderó la “gran oportunidad que tiene Argentina para ser líder regional, por sus capacidades agropecuarias e industriales y su entramado científico productivo”.
Además, puntualizó que “el proyecto crea las condiciones para el desarrollo de la cadena a nivel local, aprendiendo de las mejores lecciones internacionales”, y sostuvo que “el desarrollo de la cadena tendrá múltiples impactos positivos en el país: más empleo, más exportaciones, más innovación, desarrollo federal y acceso a la salud”.
“Hay más de 50 países que han avanzado en algún tipo de legalización para el cannabis de
uso industrial medicinal e industrial. Esto está alentando un crecimiento exponencial de la producción. Una producción global proyectada para dentro de tres años en 42.700 millones de dólares, es decir, 14 veces más que hace diez años”, analizó el ministro y explicó que Israel, Canadá y Estados Unidos son líderes a nivel mundial; mientras que en la región se destacan Colombia y Uruguay”, sostuvo.
En cuanto al cannabis medicinal, Kulfas explicó que el objetivo es el desarrollo de la cadena con uso medicinal y fisioterapéutico mediante un marco regulatorio para regularizar proyectos que hoy existen y poder complementar la ley 27.350; mientras que en relación al cáñamo, resaltó que el objetivo central es “permitir el desarrollo de esta industria, que es una variedad específica con baja concentración de THC no psicoactivo”.
En la actualidad el mercado de cannabis medicinal y cáñamo industrial está creciendo exponencialmente y será una fuente de empleo de calidad y desarrollo económico a nivel global.
En tanto, Vizzotti celebró la presentación de este nuevo marco regulatorio que completa la Ley 27.350. “Nosotros teníamos una ley que encorsetaba derechos, con una mirada punitiva y persecutoria, y sabíamos que teníamos una deuda pendiente”, afirmó y destacó la tarea realizada desde su cartera que continuó ampliando derechos en un contexto de mucha dificultad con el objetivo de facilitar el acceso a un producto seguro y de calidad.
“Hay algunas cosas que ya son una realidad, no son un potencial. El Ministerio de Salud ya aprobó nueve proyectos provinciales de cultivo e investigación en La Rioja, en Jujuy, en San
Juan, en Misiones, en Patagonia Norte, en Chubut, en Pergamino, INTA Castelar y Lamadrid. Se trata de proyectos de investigación que incluyen una etapa de producción e industrialización, lo que además de conocimiento científico genera impacto en la economía regional”, resaltó la titular de la cartera sanitaria.
“Lo más relevante para nosotros es haber saldado la deuda con la sociedad civil, dejar de sentir que las personas que usaban cannabis medicinal se sintieran perseguidas. El día que se publicó el decreto reglamentario nuevo de la ley 27.350 fue uno de los días más satisfactorios de nuestra gestión. Hasta ahora avanzamos con lo que teníamos y ahora vamos por más”, concluyó.
“Esto es producto de un trabajo en equipo, de una política de Estado y un hito de trabajo colaborativo que demuestra la importancia del uso del diálogo en el país”, afirmó el secretario de Asuntos Estratégicos de Presidencia de la Nación, Gustavo Beliz, y explicó que “este proyecto busca impulsar, ordenar y dar una regulación que permita dar una transformación productiva con fuerte poder exportador para generación de trabajo y divisas para el país”.
Por su parte, Salvarezza apuntó “para nuestra comunidad, la de los investigadores, es una oportunidad enorme para que la ciencia y tecnología sean instrumento para la transformación social, instrumentos para que la Argentina pueda encarar grandes desafíos y la única manera de hacerlo es cuando podemos sumar a todos los actores, y los científicos son un actor más que estamos agregando valor, aportando conocimiento a esa cadena productiva”.
“Desde el Ministerio de Agricultura trabajamos para llevar adelante este gran desafío, que es la producción de cannabis en la Argentina. Tenemos el compromiso absoluto para llevar adelante este proyecto de ley. Celebro que la iniciativa de tanta gente vaya teniendo frutos después de tantos años de compromiso para alcanzar este objetivo de desarrollo, que el presidente Alberto Fernández prometió llevar adelante. Este es un compromiso con la vida que tiene nuestro gobierno y este es el compromiso que tenemos para dejar de lado las divisiones políticas existentes, porque con la salud no podemos hacer divisiones partidarias que no operen para el bien común. Estoy muy satisfecho de llegar a este punto en el que estamos al borde de normalizar la producción del cannabis en la República Argentina”, sostuvo el ministro Basterra.
El potencial económico para el desarrollo de la actividad del cannabis medicinal y el cáñamo industrial para el año 2025 se proyecta en 10.000 nuevos empleos (alto porcentaje en I+D+i), US$ 500 millones en ventas al mercado interno anuales y US$ 50 millones de exportación anuales.
El objetivo de la normativa es brindar un marco regulatorio para la inversión pública y privada en toda la cadena del cannabis medicinal y complementar la actual legislación, la Ley 27.350, que autoriza el uso terapéutico y paliativo del cannabis. En el caso del cáñamo industrial, apunta a legalizar los eslabones productivos, los de comercialización y sus subproductos.
El proyecto de ley promueve mecanismos de autorizaciones para los productores y comercializadores, y estrategias de seguridad, fiscalización y trazabilidad en la cadena.
Además, impulsa la creación de la Agencia Regulatoria de la Industria del Cáñamo y del Cannabis Medicinal (ARICCAME) la que tendrá entre sus funciones regular, administrar y fiscalizar toda la cadena productiva de cannabis y cáñamo. También la de otorgar y administrar autorizaciones para producción y comercialización, con especial atención a PyMES, cooperativas y economías regionales.
La ARICCAME tendrá entre sus facultades la capacidad de coordinar acciones necesarias con organismos reguladores para el desarrollo del sector, y estará compuesta por los Ministerios nacionales de Desarrollo Productivo; Salud; Agricultura, Ganadería y Pesca; Ciencia y Tecnología; y Seguridad.
Durante el acto también expusieron los gobernadores de la provincia de La Rioja, Ricardo Quintela y de la provincia de Jujuy, Gerardo Morales; la senadora nacional Anabel Fernández Sagasti; las diputadas nacionales, Mara Brawer y Carolina Galliard; el director del IIEP CONICET, Andrés López y el presidente de la Cámara Argentina de Cannabis, Pablo Fazio.
FUENTE: Ministerio de Salud de la Nación