Tras la entrega oficial, concretada ayer, de tres obras de arte que retratan a tres pioneras de la medicina argentina, comenzó a saldarse una antigua deuda que la Facultad de Medicina de la UBA (FMED) mantenía con los componentes de sus claustros. Es que, hasta ahora, las paredes del señorial decanato y el magnífico museo de la Facultad exhibían numerosos cuadros de médicos señeros de la historia argentina, pero con una característica común: todas efigies de varones.
Con la donación de estas primeras tres obras de arte comienza a pagarse una antigua deuda de igualdad: las imágenes –intervenidas por una artista– de Cecilia Grierson, Alicia Moreau de Justo y Julieta Lanteri comenzarán a tomar su lugar en la historia y en el entorno de la dirección de la Facultad.
“En el año 1906 se recibieron apenas tres mujeres. Hoy, en cambio, son entre el 70 y 80 % de la matrícula de la Facultad. Sin embargo, todos los cuadros que se exhiben en la Facultad, al menos hasta ahora, eran de ilustres médicos varones”, destacó el doctor Luis Ignacio Brusco, decano de la FMED de la UBA. Y agregó: “Por eso creo que la presentación de estos primeros tres cuadros que serán colgados en el decanato, es saldar una deuda. Una de las tantas que la medicina tiene con las mujeres”.
Además, el responsable de la Facultad destacó que “el criterio de selección de las mujeres homenajeadas es simple: son –en mi opinión– los nombres más fuertes de la historia de la Medicina. Pero hay otras y las iremos incorporando en el futuro próximo”.
Por pura casualidad
Este evento de reparación surgió casi de casualidad: tras una reunión de rutina entre los directivos de FMED para negociar un convenio de colaboración y capacitación que serían dadas por el Laboratorio ELEA, a través de su Programa Mujeres Salud Integral (SI); los participantes de la charla se sorprendieron con el detalle de que, entre los numerosos y formales cuadros desde donde luminarias de la historia médica local “seguían” la discusión, no había ninguno de médicas. Y surgió la idea de que el Programa SI podría reparar esta omisión apadrinando una iniciativa: intervenir digitalmente una serie de fotos de profesionales mujeres de larga trayectoria y donarlas a la Facultad.
Así se hizo el encargo a la artista plástica argentina Paula Rivero, cuyos trabajos se caracterizan por ofrecer un intenso rasgo expresionista. Las tres obras, realizadas a través de intervenciones de arte digital, fueron –según la artista– un camino donde se buscó el equilibrio para que puedan convivir en este espacio de los claustros que es más solemne, más serio, pero dándole la importancia a través del color. a estas destacadas protagonistas.
Quiénes son las tres pioneras de la medicina flamantemente retratadas
* Cecilia Grierson (1859-1934): pionera y primera médica de nacionalidad argentina. Su contribución a la salud y la lucha por la igualdad de género la convierten en una figura fundamental de la historia nacional. Grierson desafió las normas sociales de su tiempo al ingresar a la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires en 1889.
* Alicia Moreau de Justo (1886-1986): destacada médica y militante del Partido Socialista. Su legado en la medicina y la política fue clave para allanar el camino a generaciones futuras. Se graduó en 1913. Su compromiso con la salud y el bienestar de las mujeres la llevó a luchar por el acceso a la educación y la atención médica para todas. Fue la segunda mujer en recibirse de médica y se dedicó a la ginecología.
* Julieta Lanteri (1873-1932): farmacéutica y médica italo-argentina que colaboró con la Fundación de la Asociación Argentina de Mujeres Universitarias y la Liga Nacional de Libres Pensadoras.
Destacar la importancia de género
Con motivo de la presentación de los cuadros. la doctora Ana Azara, gerente de cuidados primarios del Laboratorio Elea y responsable del Programa Mujeres SI, explicitó que el objetivo de la iniciativa es simple: “Destacar la importancia de las mujeres en el ámbito de la salud, homenajeando a figuras femeninas que dejaron huella, mostraron su condición de líderes y lucharon incansablemente por el reconocimiento de los derechos de la mujer”. Y completó explicando que “este es un hito del Programa, que busca que la mujer no siga siendo postergada, como antaño”.
El decano Brusco finalizó el acto destacando la intención de la institución de revalorizar el rol de la mujer en la medicina desde todos los enfoques: “Estamos en una nueva era, donde la gran mayoría de estudiantes y egresadas son mujeres. Y en esta gestión contamos con una vicedecana y un departamento de género que tiene gran presencia en la Facultad”.
