En las últimas horas, el Ministerio de Salud de la Nación comunicó que Argentina ha registrado su octavo caso de la enfermedad Mpox, conocida comúnmente como viruela del mono. Este nuevo caso se enmarca en un contexto global preocupante, con la expansión acelerada del virus en regiones de África y Europa.
Esto llevó a la Organización Mundial de la Salud a declarar una emergencia internacional de salud pública.
Preocupación por la nueva variante clado ib
La mayor preocupación radica en la aparición de una nueva variante del virus, denominada clado ib, que se considera más peligrosa y contagiosa en comparación con las cepas anteriores. Aunque hasta el momento esta variante no ha ingresado a Argentina, el riesgo de que llegue al país es elevado. Ante esta amenaza, se han intensificado los controles en las fronteras para prevenir su entrada.
La viruela del mono llega a Argentina.
En cuanto a la distribución de los casos en el país, los pacientes infectados se encuentran en diferentes regiones. En la provincia de Buenos Aires, se han registrado dos casos, mientras que en Corrientes, Santa Fe y Río Negro se ha detectado un caso en cada una. La Ciudad Autónoma de Buenos Aires concentra tres casos adicionales. Hasta ahora, ninguno de estos pacientes ha sido identificado con la variante clado ib, lo que brinda un respiro parcial a las autoridades sanitarias, aunque la situación sigue siendo monitoreada de cerca.
Casos en Argentina y su relación con viajes al exterior
De los ocho casos confirmados en el país, se destacó que cuatro corresponden a personas que han regresado recientemente de viajes al exterior. Este dato alimenta la creciente preocupación a nivel mundial por la rápida propagación del brote. Las edades de los pacientes infectados oscilan entre los 23 y 38 años, lo que refleja que el virus no discrimina por grupo etario dentro de este rango.
Es importante recordar que la viruela del mono no es una enfermedad completamente nueva en Argentina. El primer caso de Mpox en el país se registró en la semana epidemiológica 21 del año 2022. Durante ese año, se confirmaron un total de 1.025 casos, de los cuales solo dos resultaron fatales. En 2023, el número de casos disminuyó significativamente, con solo 124 casos reportados, lo que sugiere que, a pesar de la gravedad de la enfermedad, las medidas de control y prevención adoptadas han tenido un impacto positivo.
Formas de contagio y síntomas de la viruela del mono
La viruela del mono se contagia a través de diferentes vías. El contacto directo con las lesiones en la piel de una persona infectada es una de las formas más comunes de transmisión. Estas lesiones suelen manifestarse en forma de ampollas que pueden ser altamente contagiosas. Además, el virus puede propagarse al entrar en contacto con objetos personales de un caso positivo, como sábanas, ropa o toallas. La transmisión también puede ocurrir por medio de gotitas respiratorias emitidas al toser o estornudar, así como mediante el contacto directo con fluidos corporales de una persona infectada, lo cual incluye el contacto durante relaciones sexuales.
Los síntomas de la viruela del mono incluyen dolor de cabeza, fiebre y escalofríos, dolor muscular, erupciones cutáneas, inflamación de los ganglios linfáticos y una sensación generalizada de agotamiento. Estos síntomas pueden variar en intensidad y suelen aparecer entre 5 y 21 días después de la exposición al virus.
Frente a esta situación, las autoridades sanitarias instan a la población a mantenerse informada y a seguir las recomendaciones para reducir el riesgo de contagio. La vigilancia epidemiológica se ha intensificado y se espera que, con la cooperación de la ciudadanía, se logre contener la expansión de esta enfermedad en el país.
FUENTE: LM Neuquén
