La pandemia de Covid-19 está «controlada» en Francia y la posibilidad de decretar un nuevo confinamiento de la población es «extremadamente baja», incluso aunque haya una segunda oleada, aseguró este viernes el presidente del Comité Científico que asesora al Gobierno, Jean-François Delfraissy.
En declaraciones a la radio France Inter, Delfraissy reconoció que el virus «sigue circulando», sobre todo en la región de París, pero lo hace «a pequeña velocidad», lo que ha reducido de forma drástica el número de contagios diarios.
De las decenas de miles que se registraban en el momento más dramático de la pandemia, unos 80.000 diarios a principios de marzo, se ha pasado ahora a un millar, según el profesor, que destacó esta «reducción importante».
Delfraissy aseguró además que el país se ha dotado de «los medios para detectar los nuevos casos».
«Tenemos los tests, tenemos un sistema de aislamiento y de detección de las personas contagiadas que permite evitar la extensión» de los contagios, señaló el científico que encabeza el comité que asesora al Ejecutivo en cuestiones epidemiológicas.
Este grupo de científicos identificó cuatro escenarios de evolución de la pandemia, que van del control de la misma, en el que Delfraissy situó actualmente al país, hasta una «degradación crítica» que desborde a las autoridades, como ya sucedió en marzo.
El científico señaló que el escenario más posible para Francia es el primero, en el que la pandemia esté bajo control, como está actualmente gracias al confinamiento y a que «parece que el virus es sensible a cierta temperatura».
El especialista aseguró que en caso de volver a un escenario crítico, sería «extremadamente difícil» volver a dictar un nuevo confinamiento generalizado «por razones humanas, sociales, económicas y también sanitarias» ya que esa medida también tiene consecuencias en la salud.
Mientras tanto, este viernes se conoció un informe del Instituto Nacional de Investigaciones Agrícolas y Medioambientales (Inrae), en el que expertos advierten que es «extremadamente alto» el riesgo de que Francia vuelva a registrar un brote de coronavirus, informó la agencia de noticias EFE.
A través de la aplicación de modelos matemáticos complejos y proyecciones estadísticas no utilizadas hasta ahora en situaciones sanitarias, los investigadores llegaron a la conclusión que a principios de mayo, cuando se puso fin al confinamiento de la población, seguía habiendo en el país unos 100.000 casos infecciosos.
El doctor Lionel Roques, que dirigió el estudio, indicó que antes del confinamiento esos casos subían un 25% diario, pero tras la reclusión ordenada por el gobierno la reducción de positivos es muy lenta, de apenas un 5% al día.
Levantado el confinamiento, solo las medidas de distancia social y de higiene pueden evitar que la segunda oleada cobre una intensidad que vuelva a poner en jaque al sistema sanitario del país, señaló Roques.
El confinamiento logró que la tasa de infecciones por paciente contagioso se dividiera entre siete (el llamado factor R), para situarse en el 0,5, pero el experto advierte de que basta con que ese indicador se sitúe en el 1,4 para que se produzca una segunda oleada.
Por otro lado, el estudio demuestra que la llamada «inmunidad de rebaño» está lejos en el país, donde según sus proyecciones apenas 3 millones de personas han desarrollado anticuerpos, el 4% de la población, lejos del 70% requerido.
El investigador se mostró, sin embargo, confiado en que el confinamiento haya introducido determinadas prácticas, como la higiene de manos o la generalización de las mascarillas, que pueden reducir a la mitad la tasa de contagio por paciente.
«Es el único elemento que puede permitir que el número de contagios no vuelva a poner de nuevo en jaque al sistema sanitario», aseguró.
FUENTE: conclusion.com.ar