Argentina ocupa un lugar protagónico en la lucha contra el coronavirus. El miércoles, el gobierno nacional anunció que se producirá en el país la vacuna desarrollada en la Universidad de Oxford, Reino Unido, y el laboratorio AstraZeneca, gigante farmacéutico con sede en Londres.
Según lo anunciado Argentina y México serán los países que fabricarán para Latinoamérica, exceptuando a Brasil, lo que permitirá al país y a la región acceder a ella entre seis y doce meses antes, “tiempo que no hubiésemos podido acceder sin este acuerdo”, había enfatizado el primer mandatario nacional.
Lucas Filgueira Risso, bioquímico de Mabxience y socio argentino en el desarrollo de la vacuna, dialogó con el programa Acá te lo Contamos por Radioactiva 100.7 y dio detalles del proceso de elaboración de la vacuna.
Mabxience es una empresa que fue creada en 2009 y cuenta con una planta recientemente inaugurada en Garín, provincia de Buenos Aires.
“La vacuna tiene dos fases principales de proceso una es de generación de partículas virales que son capaces de mostrar al sistema inmune de que genere anticuerpos contra el coronavirus que es el principio activo de la vacuna, que es lo que vamos hacer acá y requiere de una biotecnología con el uso de monocultivos celulares de la generación de muchas partículas virales y sustancia activa que es la que después viajará a México donde en el laboratorio el granel que producimos nosotros se pone en cada dosis para cada persona que se vaya inyectar la vacuna”, destacó.
Además comentó que cada proceso tiene su importancia con una carga científica muy grande “Nosotros pudimos aportar y justo teníamos disponible una planta que estaba abocada a la producción de anticuerpos monoclonales que es nuestro producto natural pero rápidamente nos podemos reconvertir y dar apoyo para la producción de esta vacuna y es una de las únicas plantas en la región con capacidad productiva y disponibilidad inmediata para hacerlo con la tecnología que contamos”, dijo.
“La planta se inauguró en febrero, es muy nueva, estamos contentos, orgullosos y dispuestos a trabajar cuanto antes”, sostuvo el profesional refiriéndose a la infraestructura que edificaron en territorio bonaerense.
“Estamos con mucha expectativa, el proceso farmacéutico lleva mucho más tiempo que lo que está llevando esto, no se puede comercializar antes que estén los resultados que estamos esperando que más o menos estarán en octubre o noviembre. Lo que podemos hacer es empezar a trabajar y producir los primeros lotes de vacuna para mandarlos a México donde se hará el rellenado y creemos que estará en el primer semestre ya que está todo muy avanzado y en marcha. Queremos llevar la tranquilidad que se hará lo más rápido posible y queremos que sea más cerca de enero que de julio de 2021”, dijo.
A continuación comentó que desde la planta se encuentran ejecutando la transferencia de tecnología, “estamos preparando la planta, recibiendo recetas y protocolo para preparar los materiales necesarios que lleva unos meses de trabajo y para noviembre o diciembre estaremos produciendo los lotes a escala del granel y después se hará el rellenado”.
Prueba y efectos adversos
El bioquímico detalló que la vacuna tiene tres fases de pruebas clínicas: la Fase 1 sería la prueba en una pequeña población de gente para determinar que no genere toxicidad o algún otro problema más grave; en Fase 2 se demuestra que genera inmunidad realmente y en eso estuvo mejor porque en el 95 por ciento de los casos se generaron inmunidad; y en la Fase 3 se hace la prueba en un mayor número de población para tener una mayor variabilidad y es eso lo que estamos esperando y que estarán disponibles los resultados en noviembre o diciembre”
“Los primeros efectos adversos que se han visto son dolores de cabeza, no se esperan que existan otros mayores de las vacunas que hoy ya están en el mercado y entiendo que en este tiempo hay mucha duda e incertidumbre con respecto a esto”, explicó.
“Los mayores, los trabajadores de salud y quienes tengan alguna patología previa tendrán prioridad, serán los primeros en recibir la vacuna”, había manifestado de manera determinante el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, quien además consideró que, de aplicarse, va a ser “un golpe muy fuerte” para minimizar los riesgos del coronavirus.
Al respecto, Filgueira Risso aseveró que primero se va a vacunar a la población de riesgo, después al personal de salud y “a medida que se vayan realizando se van a ir repartiendo equitativamente entre las poblaciones de riesgo y los países que es el compromiso que se tiene. Una de las condiciones para el desarrollo de este proyecto es que la vacuna sea altamente accesible para toda la población y por eso el compromiso es venderla al costo y no generar dinero con esto. Cuando vimos la oportunidad de poder contribuir con esto dimos vuelta toda la planta y nos pudimos acomodar rápidamente para generar la cantidad de vacuna que se necesita”, referenció entusiasmado.
El especialista indicó que toda la comunidad científica fue abierta para la publicación de los trabajos y se compartía la información y “se dieron a conocer para que la gente de Oxford pueda comenzar a trabajar”.
“La vacuna yo creo que va a allanar el camino hacia la vuelta a la normalidad, va a permitir que toda esa restricción tan estricta que existe no prosiga pero esto nos enseña que hay que seguir con el cuidado del lavado de manos que eso quede para siempre y en cuanto al uso del barbijo, que a nosotros nos cuesta, es necesario aprender que cuando uno está enfermo hay que cuidarse un poco más que antes, ser consciente que una patología se puede contagiar y es una lección que tenemos que aprender”, aclaró.
Amismo, remarcó que se espera una producción de entre 200 millones y 300 millones de dosis, que “son las que se creen que se necesitan para América Latina a excepción de Brasil, que va a ser su propia vacuna con otro acuerdo que llevó a cabo”.
“Seguimos negociando”
“Apuesto a que será en el primer trimestre del año que viene. Soy optimista, el laboratorio dijo el primer semestre, a mediados de año, pero semestre no es eso”, afirmó Ginés González García, a lo cual aclaró que “estamos negociando con los tres estudios más adelantados, como el de China (de la farmacéutica CanSino junto con la unidad de investigación militar), los que están haciendo una experiencia clínica en el país (BioNTech, empresa alemana, y Pfizer, farmacéutica estadounidense) y el tercero que es AstraZeneca, que lleva varios meses”, en referencia al proyecto anunciado por Presidencia
160 millones de dosis producidas en ocho años
En 2012, por otra pandemia, la de la gripe A H1N1, que recorrió el mundo en 2009, se creó Sinergium Biotech, una instalación de 20.000 metros cuadrados situada en Garín, provincia de Buenos Aires. Entre su maquinaria se cuenta un robot japonés capaz de llenar 300 jeringas por minuto vigiladas por diez cámaras ópticas que si detectan unerror disponen de inmediato su descarte. Costó 80 millones de dólares y en este momento podría producir entre 50 y 60 millones de dosis anuales. Desde su inauguración, el 12 de diciembre de 2012, esta planta en la que trabajan 280 personas lleva producidas 160 millones de dosis. Ahora, es otra empresa del mismo grupo (Insud, encabezado por Hugo Sigman), Mabxience, la que tendrá el desafío de elaborar en el país y para toda América Latina (el acuerdo firmado con la Fundación Slim prevé queen México se fraccione) la inmunización desarrollada por Oxford/AstraZeneca, una de las que se encuentra más avanzada en su desarrollo y con resultados alentadores de Fase I y II. Mabxience inauguró no hace mucho una nueva planta, también en Garín, con una inversión de 40 millones de dólares, donde produce anticuerpos monocolonales biosimilares que exporta a América Central, América del Sur, África, Asia y Medio Oriente.
FUENTE: elterritorioweb.com.ar