La Secretaría de Gobierno de Salud presentó hoy la Primera Guía de Práctica Clínica para el control de la Hipertensión Arterial que incluye recomendaciones basadas en evidencia científica sobre prevención, diagnóstico, tratamiento y seguimiento de la hipertensión y busca contribuir a la disminución de la morbilidad y mortalidad causadas por enfermedades cardiovasculares en Argentina.
“La guía de práctica clínica es un ejemplo que fue elaborada con rigurosidad y la participación de todos los sectores que deben intervenir en esto, y que viene a cubrir un bache fundamental que teníamos para el abordaje de la condición que mayor mortalidad y morbilidad causa en nuestro país como es la hipertensión arterial o presión alta”, indicó el secretario de Salud de la Nación, Adolfo Rubinstein, quien encabezó la apertura del encuentro en un hotel del centro porteño.
Rubinstein recordó que “las investigaciones que dieron como resultado las guías fueron convalidadas por la 4ta Encuesta Nacional de Factores de Riesgo publicada recientemente por la secretaría de Salud de la Nación y que arroja que el más del 40 por ciento de la población argentina tiene hipertensión arterial, que una tercera parte desconoce su condición y que otro 20 por ciento no tiene acceso al tratamiento”.
Dentro de los que están diagnosticados, indicó Rubinstein “el 50 por ciento recibe tratamiento farmacológico pero más de la mitad no alcanza a estar adecuadamente controlada y este es el foco de la elaboración de esta guía, y uno de los ejes fundamentales de la ampliación de la cobertura efectiva en la estrategia de la Cobertura Universal de Salud”.
La guía cuenta con 44 recomendaciones sobre prevención, diagnóstico, tratamiento de la hipertensión arterial y contiene apartados novedosos como los de daño en determinados órganos, recomendaciones sobre cómo abordar y escalar el tratamiento farmacológico, otras específicas dirigidas a mujeres en edad fértil y a personas con diabetes, con enfermedad renal crónica y con enfermedad cardíaca establecida, entre otras.
Está destinada a equipos de salud que desempeñan tareas propias del primer nivel de atención y son responsables de la atención de personas con hipertensión, conformados por médicos, enfermeros, nutricionistas, psicólogos, promotores de salud, agentes sanitarios, licenciados o profesores de educación física, estudiantes de grado de todas las carreras vinculadas a la salud. También proveedores, administradores y financiadores de servicios de salud, decisores políticos, entre otros.
En tanto, la directora nacional de Promoción de la Salud y Control de Enfermedades No Transmisibles, Veronica Schoj indicó durante la presentación que “esta guía de práctica clínica constituye una herramienta fundamental para la implementación de Plan Nacional de Hipertensión que está en marcha en Argentina desde diciembre de 2018”.
Del encuentro participaron autoridades nacionales, referentes de los programas provinciales de prevención de enfermedades crónicas, representantes de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y de organizaciones de la sociedad civil.
El proceso de elaboración de la guía fue coordinado conjuntamente por la Dirección Nacional de Promoción de la Salud y Control de Enfermedades Crónicas No Transmisibles y el Programa Nacional de Garantía de Calidad de la Atención Médica y contó con la participación y consenso de la Federación Argentina de Medicina Familiar y General, la Sociedad Argentina de Hipertensión Arterial y la Sociedad Argentina de Cardiología.
También intervinieron la Federación Argentina de Cardiología, la Sociedad Neurológica Argentina, la Sociedad Argentina de Medicina, la Federación Argentina de Medicina General, la Sociedad Argentina de Medicina Familiar y Rural, la Sociedad Argentina de Medicina Interna General y el Hospital de Alta Complejidad “El Cruce – Néstor Kirchner”, entre otras instituciones prestigiosas y líderes de opinión en la temática.
Plan Nacional de Hipertensión
La Hipertensión Arterial constituye casi el 40% de los años de vida potencialmente perdidos por enfermedad cardio y cerebro vascular. Es un problema crónico que, según datos de la 4° Encuesta Nacional de Factores de Riesgo, afecta al 46% de las personas mayores de 18 años del país, lo que implica unos 16 millones de hipertensos, de los cuales un tercio desconoce su condición.
De los hipertensos diagnosticados alrededor de la mitad no recibe tratamiento farmacológico; y de los que se encuentran bajo tratamiento farmacológico sólo la mitad tiene la presión adecuadamente controlada.
En respuesta a esta problemática, la Secretaría de Gobierno de Salud de la Nación lanzó el Plan Nacional de Prevención y Control de la Hipertensión Arterial, en alianza estratégica con la Organización Mundial de la Salud y la Organización Panamericana de la Salud a través del GHI (Global Hearts Initiative) y su proyecto HEARTS, el cual pretende mejorar el control de los factores de riesgo a nivel mundial con el objetivo de reducir la morbi-mortalidad cardiovascular prematura.
El Plan Nacional de Hipertensión incluye un conjunto de estrategias tendientes a promover hábitos de vida saludables, estandarizar el diagnóstico y tratamiento de la hipertensión y establecer un monitoreo continuo de indicadores de proceso y resultado, para lo cual la capacitación de los equipos de salud es clave, y la Guía de Practica Cínica que hoy fue presentada es un insumo necesario para estandarizar la calidad de la atención.
Para acceder a la guía:
http://www.msal.gob.ar/images/stories/bes/graficos/0000001700cnt-guia-hta.pdf