- La persona presentaba una destrucción parcial del maxilar causada por un tumor benigno.
- La intervención implicó la resección y extracción de esta región ósea afectada, el implante de una placa de reconstrucción osteosíntesis y colocación de un injerto óseo tomado de la misma persona.
- La cirugía demandó un esfuerzo de un equipo interdisciplinario del propio hospital.
Un equipo interdisciplinario de odontología y traumatología del Hospital Pasteur realizó la primera intervención maxilofacial a un hombre de 47 años, que presentaba un tumor benigno denominado mixoma, causante de la destrucción parcial de su maxilar.
Este abordaje, denominado como hemimandibulectomía parcial, consistió en la resección y extracción de esta región ósea afectada, el implante de una placa de reconstrucción osteosíntesis y colocación de un injerto óseo tomado de la misma persona.
La cirugía, que tuvo una duración de más de cinco horas, se complementó con una intervención de cadera para lograr la obtención del injerto, que en esta oportunidad se tomó de la cresta ilíaca. Además, demandó atención odontológica por una inflamación en la región molar inferior con antecedentes de fractura maxilar.
En este sentido, Paola Rodríguez, integrante del servicio de odontología del nosocomio, explicó que en el tratamiento de persona que presentan tumores en la cavidad oral, la cirugía combina la resección y la reconstrucción inmediata con el fin de preservar las funciones de la boca, como la fonación, la deglución, la masticación y la estética.
Además, la profesional destacó la importancia de esta intervención quirúrgica realizada por primera vez en el Hospital. “Se dio respuesta inmediata a una situación compleja para un paciente que carece de condiciones socio económicas, inclusive para su traslado a Córdoba donde anteriormente se realizaban estos procedimientos quirúrgicos. Por otro lado, este es un proceso interdisciplinario que genera una vinculación sin antecedentes y que abre las puertas a nuevos desafíos”.
Por su parte Ramiro Ferreyra, jefe del servicio de traumatología, detalló que “el empleo de injertos de hueso como alternativa de reconstrucción de defectos óseos derivados de secuelas oncológicas, tiene como finalidad restablecer la integridad anatómica y funcional de una estructura alterada”.
“En esta oportunidad se utilizó un injerto autólogo o autoinjertos, que se compone por tejido tomado del propio individuo. Esto proporciona mejores resultados, ya que es el único que cumple con los tres mecanismos de regeneración ósea; osteogénesis, osteoinducción y osteoconducción. Además, evita la transmisión de enfermedades y el rechazo inmunológico”, señaló el profesional.
Cabe destacar que la cirugía implicó un trabajo interdisciplinario que contó con la participación de Paola Rodríguez, del Servicio de Odontología; Ismael Siegenthaler, cirujano invitado en el abordaje; Mauro Zernotti, del Servicio de ORL; Carlos Crismeyer, del Servicio de Anestesia; Ramiro Ferreyra y Martín Hoffman, del Servicio de Traumatología; y las instrumentadoras Claudia Zamora, Ornela Genta y Julieta Trucco.
FUENTE: cba.gov.ar