La vacuna Sputnik V “es la favorita en la lucha contra la pandemia” y es el “mayor avance científico de Rusia desde la era soviética”, aseguró la agencia internacional Bloomberg, que destaca el creciente interés de los países en asegurarse dosis del desarrollo del Instituto Gamaleya tras publicarse los estudios clínicos de Fase 3 que arrojaron una eficacia del 91,6% en la prevención del coronavirus.
“La alguna vez despreciada vacuna de (Vladimir) Putin ahora es la favorita en la lucha contra la pandemia”, se titula el artículo que da cuenta del “escepticismo” que generó el anuncio del presidente ruso en agosto del año pasado sobre la primera vacuna contra el covid-19.
Tras la publicación en la prestigiosa revista científica británica The Lancet en la que se destacaba a la Sputnik V es segura y con una respuesta en los mayores de 60 años similar al del resto de la población, los “países están haciendo cola para recibir suministros”, afirmó Bloomberg.
“La vacuna rusa protege contra el virus mortal tan bien como las inyecciones estadounidenses y europeas, y mucho más eficazmente que sus rivales chinos”, añadió el medio con sede central en Nueva York.
El artículo da cuenta que al menos 20 países aprobaron su uso, mientras que otros en donde la pandemia golpeó fuerte como Brasil e India están cerca de hacerlo y la Unión Europea también analiza su autorización, algo que Hungría, miembro del bloque, ya hizo.
En ese marco, se destaca que Argentina comenzó su programa de inoculación masiva después de recibir más de medio millón de dosis en enero y posteriormente otros países de la región tomaron la misma medida.
“A diferencia de la vacuna de Pfizer/BioNTech, la Sputnik V se puede almacenar en un refrigerador en lugar de en un congelador, lo que facilita su transporte y distribución en los países más pobres y los más cálidos”, precisó la agencia al enumerar su ventajas.
“Cuesta alrededor de 20 dólares por una vacuna de dos inyecciones, por lo que también es más barata que la mayoría de las alternativas occidentales. Aunque es más cara que AstraZeneca, la inoculación rusa demostró una mayor eficacia que la británica”, añadió.
El fármaco fue desarrollado por el Centro Gamaleya en cooperación con el Fondo Ruso de Inversión Directa.