Pese a que el Gobierno propuso armar una “mesa de diálogo” para buscar soluciones a la actual falta de insumos básicos sobre los que que diversas asociaciones médicas, cámaras de importadores y proveedores especializados vienen advirtiendo desde hace varias semanas, el problema aún continúa vigente.
La circunstancia se agravó recientemente, tal como dio cuenta un comunicado emitido el 27 de octubre por las principales sociedades científicas del mundo cardiológico. Allí los presidentes y responsables de la Sociedad Argentina de Cardiología (SAC), la Federación Argentina de Cardiología (FAC), el Colegio Argentino de Cardioangiólogos Intervencionistas (CACI), el Colegio Argentino de Cirujanos Cardiovasculares (Caccv), la Fundación Cardiológica Argentina (FCA) y el Colegio Argentino de Cardiología (CAC) afirmaban lo siguiente: “Las sociedades científicas que firman esta comunicación están extremadamente preocupadas por la escasez de insumos médicos y material de contraste que ya genera graves dificultades en la realización de estudios de diagnóstico y procedimientos cardiovasculares, sin medidas de solución hasta el momento”.
“Es de destacar que esta situación ya hoy no solo afecta la realización de intervenciones programadas sino también a las de urgencia como las angioplastias primarias en el tratamiento del infarto de miocardio o neurointervencionismo en el manejo de los accidentes cerebrovasculares, cuya inadecuada o imposible realización determinará un aumento inmediato de la mortalidad y/o discapacidad”.
